martes, 3 de noviembre de 2009

Vos sabés.

No sé como empezar ésto. Tal vez un "cuenta la historia que" o un "había una vez". Pero creo que nada de eso serviría en éste caso. Creo que las historias no tienen ni principio ni final, las historias simplemente están, se encuentran en esa línea imaginaria sin fin. Por ahí un "una noche como cualquier otra" vendría bien, pero, quién sabe? Quién sabe si ése fue realmente el "principio" de ésta historia en especial? Me parece que sería mejor dejarla divagante, sin que nadie sepa, ya que es nuestra. Nuestra historia, lo suficientemente buena y divertida; y a la vez dolorosa. Por que sólo nosotros sabemos de qué se trata. Sólo nosotros podemos ser los que juzgan éste relato. Pasamos de blanco a negro y de negro a blanco. Cuando uno era sí, otro era no. Culpables? Nunca. Sé que parecerá un tanto dudoso, sé que parecerá un tanto (ilógico?), pero lo que sé, es que ambos dos sabemos que no tiene ni principio ni fin. Por que nosotros somos. Somos con alegría, somos con tristezas, somos con celos, somos con secretos, somos con todo lo que alguien puede ser. Estoy haciéndola bastante larga, sabía que iba a ser así. Así como me gusta a mí, prolongar las cosas. Pero hay algo que vos sabés y que yo sé, que sos y vas a ser de las mejores alegrías en mí.

No hay comentarios.:

Hacé clicks acá abajo para ayudar =D